martes, 4 de agosto de 2009

T A N G O

Hace como año y medio que me metí en el mundo del TANGO, me enamoró, me gusto, me emociono, me liberó, el tango es todo pasión.


Hice un pequeño curso y aprendí muchísimo, me lance enseguida a bailar Milongas (salas donde solo se baila Tango), hay unas cuantas en Barcelona, y he pisado como unas cuatro o cinco, conocí a una chica francesa que iba sola y nos hicimos amigas, ella me explico cosas del tango que en las clases no te explican.


Por ejemplo, que el que lleva la batuta es el hombre, él es quien marca a la mujer los pasos que tiene que hacer, también que las mujeres tienen que esperar a que vaya el hombre a sacarlas a bailar, cosa que como principiante me quedaba a veces sin bailar, pero ver esos pasos, esa técnica, esa maravilla de seducción, esos pies para delante y para detrás, esos rozamientos sin ser maliciosos, simplemente un baile con pasión.


Recuerdo que me saco a bailar un chico argentino, que tenia mucho salero para saberme llevar, pues yo no se como se lo hacia pero todo lo que aprendí me lo hacia bailar, y era para mi fácil, igualmente cuando bailaba con el profesor.


Una mano del caballero te la marca en medio de la espalda un poco mas arriba de la cintura, así te lleva y te marca los pasos que quiere que se haga.


Yo nunca he sabido bailar en pareja y pensaba que no iba a saber dejarme llevar, pero era tal mis ganas de aprender que casi todos los detalles intentaba grabar en mi mente para luego llevarlo a cabo con mis pies, deslizar esos ochos para delante o para atrás, me encantaba.


Hay veces que tengo que hacer un montón de fotocopias, coloco el tocho en la fotocopiadora y mientras espero me cojo a la máquina y hago unos pasos yo sola, me encanta.


Me compre unos zapatos especiales para poder practicar, sencillos y cómodos, pero lo que mas me gustaba en las milongas era ver a las chicas tan guapas con esos zapatos de tacón alto que les hacia mas esbeltas, y con el movimiento eran las reinas de la fiesta.






Vaya rollo con el tango, en definitiva, ahora que no tengo a los peques, este agosto quiero probar a llevar a Miguel a que haga una clase de tango, se lo he propuesto, no le veo muy convencido, pero no me ha dicho que no, y eso es un principio, no se ha negado, lo va ha intentar por mi, por que sabe que me gusta.


Es una cosa mía, y no quiero obligarle, si Miguelillo no le gusta, esta claro que no le voy a molestar mas.


Bueno, ya os diré si le ha gustado o no.